Todo muy nuevo y limpio, con una habitación amplia y un porche privado. La piscina al aire libre fue un toque genial para mis piernas cansadas.

Un poco apartado del pueblo, como si estuviera en busca de la calma, pero sin acceso a un buen café.

Un lugar acogedor y moderno. La piscina fue perfecta para relajar mis piernas cansadas de caminar. Me encantó la decoración y el ambiente tranquilo.

me sentí muy bien, no tengo ninguna queja

El ambiente es ideal para relajarse, rodeado de naturaleza y con un personal amable que te hace sentir como en casa. Las habitaciones son amplias y tienen un pequeño jardín privado perfecto para descansar. La comida fue deliciosa, especialmente la tosta de pulpo, y el spa privado es una experiencia rejuvenecedora. Sin embargo, la ubicación es algo apartada, lo que puede complicar salir a explorar o cenar sin un taxi, y la piscina podría beneficiarse de un servicio de bar.

El ambiente es perfecto para desconectar, pero el

acceso al centro de Arzúa puede ser un poco complicado, especialmente si no has organizado un taxi. Sin embargo, la hospitalidad de Mari y Sara es excepcional. te hacen sentir como en casa. La piscina fue ideal para relajarnos después de las caminatas.

A Ambiente tranquilo
B Comida gallega deliciosa
C Atención personalizada

A Ubicación algo apartada
B Desayuno limitado

experiencia agradable pero con ubicación algo lejana

El personal es amable y realmente hace todo lo posible por hacerte sentir bienvenido. La habitación era moderna y contaba con un pequeño jardín privado que ofrecía un espacio perfecto para relajarse al aire libre. Además, la piscina al aire libre fue un toque encantador después de un largo día de caminatas.

La ubicación es un poco alejada del pueblo, así que caminar para cenar puede ser complicado.

La piscina al aire libre fue un verdadero alivio para mis piernas cansadas después de caminar tanto. Es un espacio muy agradable para relajarse.

La ubicación es un poco alejada del pueblo, así que caminar para cenar o explorar puede ser complicado, sobre todo después de un día de caminatas.

Todo muy limpio y el Wi-Fi rápido, pero el hotel está algo alejado del centro.

exploración fácil de los encantos de arzúa desde un buen hotel

A pesar de que estaba un poco alejado del centro, la hospitalidad fue increíble y el masaje con Mari fue de los mejores que me he dado, un verdadero alivio después de tantas caminatas por los atractivos locales como la Capela da Madalena y la Iglesia de Santiago de Arzúa, ambos a unos 20 minutos a pie en un recorrido agradable por la zona.

Muy buena piscina exterior.

El hotel ofrece una buena relación calidad-precio para una estancia breve. La habitación era amplia y contaba con dos botellines de agua, lo cual es muy apreciado después de caminar tanto. Sin embargo, está un poco alejado del centro, lo que puede suponer una caminata extra para los peregrinos que quieran comer o explorar la zona.

Hotel A Curuxa Wellness es un lugar encantador. Las habitaciones son amplias, luminosas y muy limpias, ofreciendo una comodidad excepcional. La piscina al aire libre fue un verdadero alivio para mis piernas cansadas después de una larga caminata. El personal, especialmente Mari y su hija Sara, fueron extremadamente amables y se aseguraron de que me sintiera como en casa. Cenamos en el restaurante, y la comida fue un placer gastronómico, con sabores gallegos auténticos que disfrutamos mucho.

Un poco alejado del pueblo.

Fue una buena elección para una breve pausa en Arzúa con una excelente relación calidad precio. La habitación tenía dos botellines de agua, lo cual se agradece mucho después de caminar tanto. Para los que vayan a salir, intenten organizar el taxi con antelación para no caminar mucho.

Lugar increíble para descansar después de tanta caminata. Habitación limpia y moderna, y la piscina, un lujo para las piernas cansadas. El desayuno, aunque simple, cumple con lo básico. Personal simpático, siempre dispuestos a ayudar. Tremenda atención y buena onda.